Hoy volvemos a destapar deseos, para hablar de un objeto para mi deseable: las maletas. Siempre me han gustado las maletas. Recuerdo unas de piel cuadradas marrones con grandes hebillas con las que viajábamos en familia mis padres, mis hermanas y yo. Recuerdo esas maletas con asa, nada de troley para arrastar, ni samsonites ligeras como una pluma…¡¡¡Todo a pulso señores!!!… Una más grande, otra mediana y otra más pequeña. Suficiente número y tamaño para albergar trapitos, neceseres y souvenires para nuestros family road trip particulares.
Ahora me siguen gustando, mucho. En los aeropuertos, además de no parar de oler perfumes en los duty-free hasta que la cabeza me da vueltas, me fijo en ellas, en las maletas … Pero lo que más me gusta es descubrirles otras utilidades, algunas ingeniosas y originales. Descubro maletas con interiores florales de lo más alegre y vistoso, con topos, con lazos, como mesita de noche o mueble auxiliar, como lugar ideal para hacer una foto de lo más tierna o para decorar una mesa chula en una fiesta o evento…
En cualquier caso, mejor pasen y vean …
¿Qué os han parecido las maletas? ¿Os gustan? Yo ya tengo algunas ideas chulas para darles uso…